Mega, la cadena de televisión abierta chilena propiedad de Megamedia, se hizo con los derechos de exhibición en territorio chileno del Festival de Viña del Mar para el período 2025-2028. El Consejo Municipal de la ciudad de Viña del Mar aprobó la oferta de 137 mil unidades de fomento (UF), hoy en día unos CLP 5 mil millones, equivalentes a USD 5,4 millones. Mega había sido el único oferente por la televisación del festival de música.
Así, Megamedia, junto a Bizarro, empresa chilena de producción de eventos, serán quienes produzcan y transmitan para Chile el festival entre 2025 y 2028. Luego de esta decisión, el siguiente paso será la firma del contrato. Mega había tenido la televisación del festival en la década de 1990, entre 1994 y 1999. La última licencia de transmisión del evento había sido de TVN y de Canal 13, en conjunto. En el resto de Latinoamérica, los derechos de exhibición de las últimas ediciones los tuvo el OTT Star+ (Disney).
Luego de la noticia, Mega expresó lo siguiente en un comunicado: «Hemos conocido, a través de la transmisión pública del canal digital de la Municipalidad de Viña del Mar, la votación del Concejo Municipal. Esperamos que desde el Municipio nos llamen prontamente para firmar el contrato e iniciar el trabajo para tener un gran festival los próximos cuatro años. Ahora estamos a la espera de que concluya este proceso en todas sus etapas para poder referirnos en extenso al tema».
Las bases de la licitación incluyeron, no solamente la transmisión y la organización del festival, sino también una importante inversión en obras de desarrollo para el anfiteatro de la Quinta Vergara, sede habitual del festival. Esa fue la principal razón por la cual el resto de los canales nacionales abiertos no presentaron oferta, dejando a Mega como el único postor. Las bases también contemplaban la realización de un conjunto de actividades para impulsar el desarrollo económico de la ciudad de Viña del Mar y su promoción turística, métricas para la selección de artistas, cupos reservados para artistas chilenos y la obligación de realizar programas televisivos desde la ciudad.
