La Justicia de Argentina emitió un fallo que dispuso el bloqueo de todos los dominios relacionados con el operador ilegal Magis TV, uno de los servicios pirata de televisión más populares de América Latina. Además, se le ordenó a Google que inhabilite la aplicación de Magis TV en el sistema operativo Android. La misma suerte corrieron otros dos servicios ilegales: Mospy TV y Federico TV. La causa la originó Alianza Contra La Piratería Audiovisual, la organización que pelea contra la transmisión ilegal de contenidos audiovisuales en la región y que está conformada por empresas de TV Paga, canales, propietarios de derechos y entidades relacionadas.
El caso incluyó dos allanamientos simultáneos. Uno en Buenos Aires, en el local Kive, y otro en Misiones, en el local TodoTech. Se secuestraron decodificadores ilegales, comúnmente denominados TV Boxes, que servían para transmitir canales de TV Paga y que tenían instalada la aplicación de Magis TV.
Esta investigación forma parte de la Operación 404, una iniciativa internacional que nació en Brasil. Es dirigida por el Ministerio de Justicia de Brasil y cuenta con la participación de entes gubernamentales de Argentina, Perú, Paraguay y Reino Unido. Gracias al trabajo de la Operación 404 ya se desmantelaron un total de 675 sitios web y 14 aplicaciones ilegales. Cinco personas fueron detenidas.
Alianza informó que «Magis TV es el mayor servicio ilegal de televisión por protocolo de Internet de Latinoamérica por volumen de usuarios, con 55 millones de visitas en los últimos seis meses en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, México, Perú, Uruguay y Venezuela». «Este servicio retransmite televisión en directo por medio de Internet de forma ilegal dado que no cuenta con los derechos de retransmisión. Se trata de una aplicación que roba de diversos programadores y distribuidores contenidos audiovisuales para ofrecerlos directamente a los usuarios. La instalación de la aplicación en los celulares, computadoras, tablets y smart TVs convierte a los usuarios en víctimas de la descarga de virus y malware, con los que luego se ejecutan distintos tipos de estafas, que van desde el robo bancario hasta la comercialización de datos personales a otras redes ilegales», explicaron desde la organización antipiratería.