El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), el ente regulador de dicho mercado en México, informó la semana pasada que sus estudios arrojaron que la prestación de TV por suscripción del operador Megacable cuenta con «poder sustancial de mercado» en nueve localidades. Para contrarrestar esta situación, el organismo estableció que Megacable deberá brindarle a sus competidores la posibilidad de revender su servicio de TV Paga, es decir, convertir en dichas plazas la prestación en un «servicio mayorista de reventa».

Las localidades identificadas en las que Megacable tiene poder sustancial de mercado son: San Mateo Atenco y Zinacantepec en el Estado de México; León en Guanajuato; Guadalajara y Tonalá en Jalisco; Cuautlancingo y San Pedro Cholula en Puebla; y Corregidora y El Marqués en Querétaro.

Además de la obligación de ofrecer un servicio mayorista, el IFT también fijó que el operador deberá «limitar los plazos forzosos a los que estarían obligados los usuarios finales al momento de contratar su servicio y evitar condicionantes adicionales que les impidan la libre elección de un proveedor».

Megacable rápidamente emitió un comunicado como respuesta a esta determinación del IFT. Señaló que es «improcedente» y que ha presentado una «demanda de amparo». «Adicionalmente, Megacable iniciará las acciones legales correspondientes en contra de las medidas específicas emitidas por el IFT al extralimitarse en sus facultades, tanto en los alcances de las propias medidas como en el Grupo de Interés Económico determinado para el cumplimiento, lo que resulta en una violación a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, además de violentar los principios de legalidad y proporcionalidad». Igualmente, la empresa de telecomunicaciones concluyó que «las medidas impuestas no causan ni constituyen un evento relevante que afecte las operaciones de Megacable de cualquier tipo».